miércoles, 10 de octubre de 2012

Debate del mes: Octubre 2012














Ya estamos de vuelta en las clases. Y el runrún está en el aire.

Este blog pretende recoger las inquietudes y las realidades de los Centros Educativos en Bormujos y, por tanto, no podía dejar de tocar este tema.

Ha habido muchos recortes en el Sector Educativo (como en muchos otros), el profesorado está muy molesto porque nos han reducido el sueldo varias veces en los dos últimos años, aumentado las horas de trabajo, reducido los presupuestos de los Centros, aumentado la ratio de forma encubierta al definir el número de grupos en los Centros, aumentado el tiempo en el que una baja no será cubierta, eliminados puestos de trabajo en Educación Especial, cambiado las tareas del profesorado de Apoyo en Infantil y Primaria,... algo hay que hacer, por lo menos, protestar y dejar claro nuestro malestar.

Pero ¿cómo debemos hacerlo?

Esa es la gran cuestión. Nuestros “clientes” son los alumn@s y la calidad de su educación no debería  sufrir por nuestras propuestas, porque ya se ve afectada y mucho por las medidas adoptadas por la Administración.

Los padres y madres deberían ser nuestros aliados, porque sus hijos e hijas son los grandes afectados. Pero el profesorado muchas veces tiene la sensación de que no lo son, de que no protestan con nosotros sino contra nosotros y que incluso parecen creer, a veces, que no tenemos derecho a protestar porque nuestro puesto de trabajo es fijo (por ahora, claro). ¿Entienden que no nos quejamos sólo por el sueldo? ¿Hemos hecho el esfuerzo de explicárselo?

En muchos Claustros se está debatiendo qué hacer. Muchos Centros han optado por no hacer Actividades Extraescolares por acuerdo de Claustro, otros por hacerlas sin los padres y madres (de puertas adentro). Se han escrito manifiestos y se han leído en las presentaciones del Curso. Se hacen manifestaciones en las puertas de los Centros antes de entrar con camisetas de colores (el verde es el más extendido). Aparte, sin que se vea menoscabada nuestra profesionalidad, es verdad que nuestra motivación se ve afectada por la situación y la tentación de hacer lo mínimo, existe.

¿Son suficientes las medidas que se están tomando? ¿Son demasiado? Se crean situaciones de enfrentamiento con los padres y madres con determinadas medidas, ¿nos conviene? ¿Se da por enterada la Administración, que es la destinataria final de las quejas, o no le importa nada? ¿Sirve para algo todo lo que hacemos?

Beatriz Lazo
Profesora en el IES Juan Ciudad Duarte

3 comentarios:

  1. Las protestas de los docentes no pueden ir en contra de la calidad de la propuesta educativa que se le de a los alumnos, éstos ya tiene suficiente con los recortes. Por eso, las distintas medidas de protestas debieran ser consensuadas. Cuando toda la comunidad educativa (padres,docentes,alumnos) se una para pedir una educación mejor, se conseguirá algo. Saber comunicar y concienciar a las familias de la situación es lo primero que debe hacerse. Así toda movilización tendrá más fuerza.

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  2. Ante todo,estoy de acuerdo con vuestro malestar, después de tantos recortes como os han hecho,como en casi todos los ámbitos de nuestra sociedad. Pero me ha llamado la atención tu artículo, pues debería de ser más fácil de lo que parece las respuestas a tus preguntas.Debéis de seguir con vuestras protestas sin que afecte al alumnado, pues aunque no lo parezca, ellos lo notarán y los padres también.
    En este tema, el de los padres, ¿nos habéis pedido ayuda de algún tipo?, ¿nos habéis explicado vuestra situación?. Esa alianza de la que hablas, profesores-padres,deberiáis de pedirla o buscarla ustedes, a través de diálogos, reuniones, explicaciones..., no todo el mundo está al tanto de lo que ocurre y fuera solo se ven los malos rollos y a veces hasta falta de actitud.
    Por todo ello, estoy de acuerdo con el anterior comentario de Candilenelpatio, cuando profesores, padres y alumnos se unan de verdad, puede que todo llegue a buen puerto.

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  3. No tengo dudas de que el profesorado debe movilizarse y responder colectivamente a lo que está pasando que no sólo afecta a sus condiciones laborales sino también a las condiciones de una educación de calidad. Tampoco tengo dudas que dicha respuesta debe unirse, coordinarse, relacionarse ... (como quieran llamarlo) con los intereses y reivindicaciones de padres y alumnos. Aunque a veces no lo parezca, están en el mismo barco y su desunión lo hunde. Dicho todo lo anterior, dicha resistencia debe ser creativa y activa. Con otras palabras: No se trata de no hacer o hacer menos sino de HACER OTRAS COSAS que, quizás, nunca se han acometido.

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