miércoles, 2 de noviembre de 2011

E-mail, canal ideal de comunicación entre padres y docentes

E-mail, canal ideal de comunicación entre padres y docentes

Como cualquier padre con hijos en edad escolar, estoy saturado de mensajes relativos a la necesidad de que los padres colaboremos con los docentes en la labor educativa de los hijos. Esta aseveración no merece ninguna discusión. Sin embargo debajo de esa afirmación subyace una condición necesaria para que se pueda cumplir con ese deber de colaboración. Me refiero a la necesidad de mejorar (y en algunos casos iniciar) la comunicación entre docentes y padres y viceversa. No puede haber una colaboración si no se sabe qué contenidos se están desarrollando en clase, que circunstancias están rodeando a la vida familiar del alumno y cómo está siendo la respuesta de éste en ambos ámbitos.

En mi inexperiencia como padre, el primer año que mi hijo entró en el colegio solicité una tutoría en el primer trimestre, por el simple deseo de conocer cómo le iba a mi hijo en clase. De este encuentro con el docente, deduje (entre otras cosas) su extrañeza porque solicitara una tutoría cuando “todo iba normal”, con lo cual decidí no repetir la experiencia a menos que existieran indicios de que había problemas. Pues bien, comenzado su tercer año en el colegio, y sin recibir ninguna información previa, se me informa de que mi hijo debe participar en actividades de refuerzo, en el mismo momento en el que se me presenta el documento para su autorización. Hasta ese momento su tutor no me había comunicado ninguna situación anómala que hubiese indicado que iba a ser necesaria esta intervención.

Y yo me pregunto. ¿Cómo es posible que en pleno siglo XXI -qué frase tan manida- no se pueda encontrar una vía de comunicación que permita a los profesores y padres mantener un contacto con una mínima periodicidad? Un contacto que permita compartir la carga que supone la educación de los hijos, teniendo información concreta y directa de la evolución de cada alumno.

Durante los tres años que lleva mi hijo en el colegio no he recibido un sólo correo electrónico informándome sobre contenidos del curso o sobre el desarrollo de las clases y ni mucho menos sobre algún aspecto puntual del trabajo de mi hijo, ni tengo constancia de que se haya puesto en práctica con otros alumnos. Sin embargo, raro es el día en el que algún profesor no hace algún comentario apresurado sobre el desarrollo del trabajo de sus alumnos a la recogida de los mismos a mediodía, en medio del barullo habitual de la hora de salida. Y yo me pregunto ¿no sería más fácil enviar un breve correo electrónico que informara a los padres de la situación? Quizás estoy pidiendo demasiado.

La última información relativa al uso del correo electrónico como vía de comunicación entre padres y docentes, ha estado vinculada con la imposibilidad de utilizarlo por la “necesidad de tener una autorización expresa de la totalidad de los padres para poder hacer un uso efectivo del mismo”. ¿Tres años para poder obtener esta autorización? Y yo pregunto, si cada padre ha dado su autorización para que se utilice su email, ¿por qué es necesario esperar a una autorización expresa y colectiva de todos para utilizarlo? La única respuesta que encuentro es que desconocen el uso de la opción CCO (Copia de Correo Oculta), colocando en este campo las direcciones de los destinatarios no se distribuye ninguna dirección personal de nadie y sin embargo sí es efectiva la comunicación por email.

Me sorprende que estemos planteando dotar las aulas de ordenadores portátiles y no seamos capaces de hacer un uso eficiente de una herramienta de comunicación tan potente como el correo electrónico.

Recomiendo el artículo que se cita en este mismo blog titulado “La aún débil escuela 2.0” . En él me he detenido en la afirmación del director de Formación Profesional del Ministerio de Educación, Sr. Soler: “El desafío es lograr que las aulas del siglo XIX, con profesores del XX y alumnos del XXI, avancen hacia el futuro”. A veces pienso que cuando hablamos de TIC todos pensamos en aulas supertecnificadas en las que el papel del profesor parece devaluarse. Sin embargo, la principal ventaja que nos ofrecen las TIC es la abismal capacidad de mejorar nuestras relaciones comunicativas entre todos los actores, salvando las limitaciones espacio-temporales, poniendo en valor precisamente el papel de tutor y guía de ese profesorado que pasa la mayor parte del tiempo con nuestros hijos.

Conclusión

No es aceptable que estemos hablando de colegios TIC y no seamos capaces de establecer lazos comunicativos entre padres y profesores a través de estas tecnologías. Si cambiamos libros por ordenadores y pizarras por pantalla no avanzaremos. El verdadero cambio debe estar en aumentar la comunicación entre todos mediante estas TIC, sin escudarnos en “discutibles” problemas legales salvables a través de un mínimo conocimiento de las herramientas tecnológicas.

Os dejo algunos enlaces relativos al tema en cuestión:

http://jei.pangea.org/edu/f/tic-uso-edu.htm#_Toc50017388

(Epígrafe 3 B)

http://www.distancia.unam.mx/educativa2/doctos/t2correo.pdf

Página 14.

FDO: José Antonio Sánchez Flores (padre de alumno del CEIP Santo Domingo de Silos)

3 comentarios:

  1. Manuel Ramírez Aguilera3 de noviembre de 2011, 0:03

    Entiendo que la persona que ha escrito este artículo no ha captado el sentido que este blog tiene.
    Los artículos que aquí deben tener cabida son aquellos en los que aportemos experiencias, pensamientos, etc. que nos enriquezcan a todos. Que sean una herramienta de formación para los profesionales y herramienta de formación para padres y madres. Este blog no es un altavoz para la crítica de las actuaciones de determinados profesionales. Ni siquiera es el lugar en el que los profesionales pongan patas arriba el modelo educativo de algunas de las familias que forman nuestra Comunidad Educativa, aun habiendo motivos de sobra, en algunos casos, para ello. Este blog no es sindicato de profesores ni tampoco lo es de padres y madres.
    Estimo que la posible falta de comunicación e información puede darse en casos aislados, pero su afirmación:
    - "Durante los tres años que lleva mi hijo en el colegio no he recibido un sólo correo electrónico informándome sobre contenidos del curso o sobre el desarrollo de las clases y ni mucho menos sobre algún aspecto puntual del trabajo de mi hijo, ni tengo constancia de que se haya puesto en práctica con otros alumnos", demuestra que cuando se le ha citado (y es seguro que se le ha citado) para esos temas, usted, como los malos alumnos, (perdone la comparación, pero es que viene al pelo) faltó a clase.
    La educación de un hijo es muy importante. Es tan importante que no debemos reducirla exclusivamente a la frialdad de un correo electrónico que, debe ser exclusivamente una herramienta más; útil en determinados momentos, pero jamás sustituto del contacto personal y directo. Ese contacto personal y directo que usted debe reivindicar ante quien corresponda EN EL CENTRO EDUCATIVO DE SU HIJO.

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  2. Hola buenos días.

    Yo soy profesor de otro centro y además en este caso padre también de un alumno del CEIP Santo Domingo de Silos.

    Sobre esta temática de la comunicación entre miembros de la comunidad educativa, a título personal, veo el correo electrónico como una herramienta voluntaria y complementaria de comunicación.

    Para ello, la Consejería de Educación, tiene un sistema para hacerlo de una forma más integrada. Se llama la plataforma PASEN, y por desgracia no es muy usada. Allí se encuentran mucha información y herramientas como las que se piden en esta entrada del blog.

    Os dejo información sobre ella:

    " PASEN, permite la comunicación
    entre los distintos miembros de la comunidad educativa (tutores/as legales,
    alumnado, cargos directivos y profesorado)"

    https://www.juntadeandalucia.es/educacion/portalseneca/web/pasen/inicio


    Para quien no lo conozaca, tenéis unos manuales en el enlace anterior, en la zona derecha de la web.

    saludos

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  3. Me dirijo a usted,José Antonio Sánchez Flores, padre de un niño al que deja en un centro educativo en manos de unos profesionales que tienen un único objetivo LA FORMACIÓN de su hijo y de otros tantos niños.

    ¡¡UUFFF!!, ¡FORMACIÓN...!!!, ¿somos conscientes de la función real de los docentes???, No imagino otra profesión con "mayor peso en su mochila", sin embargo no me salen las cuentas. Al maestro, digamos por no dispersarnos "las circunstancias", le imponen un número de alumnos, unas horas lectivas, unas horas no lectivas, horas complementarias, de coordinación o de atención a las familias,... y no parece importar realmente si el profesor aprueba esa distribución de elementos y recursos, impuesta para la Formación de sus alumnos.
    El profesor dispone de una hora a la semana para atender en tutorías a 25 familias mínimo.Como ejemplo, 4 TDAH que lo son ininterrumpidamente, impulsividad y conflictos constantes, incapacidad para la concentración, rebeldía,falta de materiales diariamente,falta de trabajo en casa,alguna alta capacidad que gestionar, 5 que no asiten con asiduidad porque necesitan en casa de sus quehaceres, apatía, traumas,baja autoestima,enfermedades,... . Si dentro del aula resulta difícil la combinación de estos elementos sacando partido individualmente al desarrollo del alumno y cumpliendo con las exigencias de impartir una programación diaria, imagínese lo complicado que será atender en una sola hora a la semana las necesidades de comunicación entre todas estas familia y escuela y de algunas otros actores que intervienen en la labor educativa de los niños como psicopedagos o profesores particulares, todo ello coordinado por el profesor.
    Ante esta situación el maestro se convierte en una especie de prestidigitador que con su experiencia, profesionalidad y un horario que no aparece ni por asomo en ningún papel, va consiguiendo su objetivo a pesar las mil trabas que gratuitamente se encuentra en el camino y de saberse el centro de las crítica de demasiados padres...

    ESTOY DE ACUERDO CON USTED EN LA INIGUALABLE APORTACIÓN QUE PODRÍAN SUPONER, BIEN GESTIONADAS, LAS TIC PARA FACILITAR LA LABOR EN LA COMUNICACIÓN Y GESTIÓN DE LOS CENTROS, tanto que, al leer el título de su artículo, busqué, decidida, la aportación positiva a la necesidad de todos, especialmente los que somos asiduos a la lectura de este BLOG EDUCATIVO, de descubrir cuántas experiencias se llevan a cabo dentro de las escuelas y dentro del seno familiar o social, que ayudan a que nuestros hijos aprendan a ser competentes en cualquier momento y circunstancias.

    No he encontrado en su artículo lo que buscaba, "ALGO QUE SUME", por el contrario, y a pesar de entender su convicción de que el uso y buen uso de las TIC ayudaría de forma capital a en la comunicación, veo un parecer subjetivo, de cuestiones concretas poco analizadas y contrastadas (p.e.:"-De este encuentro con el docente, deduje (entre otras cosas) su extrañeza pporque solicitara una tutoría cuando “todo iba normal”, con lo cual decidí no repetir la experiencia a menos que existieran indicios de que había problemas"-). que no tiene, a mi entender, " PORQUE RESTA" cabida en este espacio de comunicación que usa las tecnologías en pos de la excelencia educativa.

    Espero encontrar en próximas aportaciones, quizás suyas, nuevas espectativas que confirmen que damos pasos certeros, a pesar del tortuoso camino que , JUNTOS, nos queda por recorrer.

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