domingo, 20 de enero de 2013

DEBATE DEL MES: ENERO 2013

Sirva este artículo publicado en el boletín 52 de la revista REDES, como punto de partida de un debate que es necesario:
En una reciente investigación (Alsina y Llach, 2012), señalan que existe una práctica muy extendida en Educación Infantil que consiste en enseñar los sistemas externos de representación (letras y números) sin asociarlos a su comprensión. Se enseña la mecánica sin considerar otros conocimientos que aseguren su comprensión. Señala que uno de los factores que determinan las prácticas docentes son las orientaciones curriculares que frecuentemente o son mal entendidas o se toman como referencia currículos que no están vigentes.
Si solo se está enseñando la mecánica, no solo hemos perdido el norte:
Hemos dejado de aprovechar aquellas situaciones y momentos de la vida cotidiana en que se hace necesario leer y escribir.
Hemos dejado de valorar las ideas previas de nuestros alumnos/as, partiendo de la fase en la que se encuentra cada niño/a.
Hemos dejado de participar en prácticas letradas auténticas, donde los niños aprenderán que leer y escribir son actividades culturales y, valorarán el lenguaje escrito  como instrumento  de comunicación, representación y disfrute.
Hemos dejado de generar situaciones educativas que promuevan la utilización de las distintas formas de expresión y representación en un clima de aceptación que facilite la expresión personal, libre y creativa.
Hemos dejado de fomentar en los niños/as el empleo de códigos matemáticos convencionales o no convencionales como herramientas para expresar y comprender las relaciones de tipo  cualitativo y cuantitativo que entre objetos y elementos pueden establecerse.
¿Están los profesionales de la educación revisando su propia actividad desde un marco actualizado y científico en el diseño de dichas tareas?
¿Hay una reflexión en los centros educativos sobre la necesidad de formación en la enseñanza-aprendizaje de sistemas externos?
¿Conocemos nuestro currículo?
La iniciación al conocimiento del código escrito supone la utilización gradual y autónoma de los diferentes soportes de la lengua escrita como libros, revistas, periódicos .Se deben crear momentos donde se invite a escribir en situaciones reales. Escribir supone un complejo proceso cognitivo o intelectual que acaba con la producción de un texto.
¿Estamos ofreciendo a nuestros alumnos/as oportunidades de escritura que contemplen este proceso , en situaciones y contextos comunicativos?
Otro de los factores son las presiones de la Etapa de Primaria respecto a la de Infantil acerca de la lectura y escritura. Aquí, tenemos que decir que se dan casos tan paradójicos como el que en primero y segundo se repitan las mismas fichas que hicieron los niños ya en infantil o que a niños que ya saben leer se les obligue a seguir un ritmo de iniciación.
¿Se llevan a cabo programas de tránsito?, o simplemente es un documento mas.
¿Se  establecen criterios de actuación conjunta mediante la utilización de estrategias de coordinación entre docentes de ambas etapas educativas?
Las concepciones mismas de profesorado son otro factor que determina una práctica docente donde la enseñanza de los sistemas externos de representación se configura como la primera finalidad de la etapa de infantil. Esto es una prueba de que cuando se pierde el norte no siempre es por causas externas.
 Y finalmente está la presión social, las familias, que consideran a la educación infantil como una preparación para primaria.
Como afirman Alsina y Llach el problema, pues, no radica tanto en lo que se hace sino en lo que se deja de hacer al dedicar buena parte del tiempo a copiar, reseguir o dibujar representaciones semióticas. Y después ya no hay tiempo para ello.
¿Por qué dejamos de plantear a nuestro alumnado retos que puedan resolver investigando, experimentando, cometiendo errores, creando hipótesis…?
¿Por qué no escuchamos las posibles soluciones que puedan plantearnos nuestro alumnado, aunque se alejen de las que queríamos conseguir nosotros los maestros?...
Necesitamos un cambio de mirada, para poder darnos cuenta que es mucho más fácil aprender desde situaciones reales que la vida nos plantea y nos ofrece en nuestra rutina escolar y que no vemos.
En ocasiones estamos tan inmersos en realizar múltiples fichas para todos los días y por realizar actividades sobre el día de…, que nos estresan y no nos dejan tiempo para lo que realmente importa. Esto no es otra cosa que, aprender desde situaciones que nos planteen retos que podamos resolver desde múltiples actividades investigativas.

Juana Moreno Gordillo
Mª Rocío Sánchez Bonilla
CEIP “Santo Domingo de Silos", Bormujos (Sevilla)

5 comentarios:

  1. Desde luego creo que hay que replantearse muchas cosas en la etapa de infantil. No tiene sentido esa "exigencia", más por parte de padres que de los profesores, en saber leer o escribir cuando acaben los 5 años. Profesores que temen que su clase salga peor "preparada" que las otras, qué dirán los padres, qué dirán los compañeros del primer ciclo de EPO. El respetar los distintos procesos de aprendizajes son fundamentales, no todos tienen que ir al mismo ritmo, sobre todo a una edad como los 5 años, por ejemplo, recordar que en Finlandia empiezan a los 7 años. Respetar y motivar la creatividad de los niños, premiar el error como un camino necesario para llegar a la solución... Evitar la competitividad, que no la superación, Y trabajar la comprensión, fundamental para asentar los pilares fundamentales de lo que queda por venir en EPO y ESO. La coordinación vertical, imprescindible. Muchas cosas por hacer, dialogar y reflexionar en una etapa importantísima para los niños. El título de Secundaria se empieza a sacar en Infantil. Buen artículo ;-)

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  2. La Educación Infantil es una etapa con identidad propia‚ en la cual hay establecido un curriculum con sus objetivos‚ contenidos… Dentro de estos‚ sí se alude a que desde infantil debemos aproximar a nuestro alumnado a la lectura y a la escritura y señalo aproximar. Evidentemente‚ no vamos a frenar el desarrollo de nuestros niños y niñas en este aspecto‚ en nuestras manos está proponerles situaciones‚ y aprovechar las que se nos presentan‚ de manera funcional y significativa para ellos. No es muy interesante ni atractivo para niños de 3‚ 4 y 5 años repasar millones de veces la letra a‚ ni leer en una cartilla “mi mamá me mima‚ mi mamá me ama”. Sí lo es en cambio‚ escribir una carta a un compañero que se ha ido‚ trabajar con cuentos y poemas que sí tienen sentido (no como las frases anteriores)‚ leer y analizar noticias que les son cercanas‚ elaborar listas de materiales que nos harán falta para realizar alguna tarea…;es increíble el interés que muestran en escribir sus cartas a los Reyes Magos y cómo se esfuerzan para que estén correctamente escritas. Por todo esto‚ creo que debemos ser conscientes de todo lo que se hace en infantil y no sólo en el ámbito lecto-escritor. En esta etapa se sientan las bases para futuros aprendizajes‚ y creo que desde Primaria‚ se debería reconocer y apreciar el trabajo que se hace en infantil y poder llevar a cabo un tránsito real. Quiero decir que sí hay compañeros/as de primaria que valoran lo hecho anteriormente‚ y lo aprovechan; pero también hay casos‚ y espero que cada vez sean menos‚ que en 1ºde Primaria‚ cuando la mayoría de la clase va leyendo y escribiendo‚ vuelven atrás ‚haciéndoles realizar fichas de efectuación‚ repetitivas y sin ningún sentido‚ intentando hacer ver que es que esa clase es “mala” y no viendo‚ que es que esa clase se aburre con ese tipo de tareas.
    Ante todo recordar‚ que el objetivo de saber leer y escribir de manera convencional‚ es un objetivo de primer ciclo de primaria y‚ que evidentemente‚ cada niño/a tiene su ritmo de aprendizaje‚ que debemos respetar y acompañar como docentes‚ como guías de sus aprendizajes.

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  3. Me parece fundamental que hayáis abordado este tema en la etapa de Infantil, hacéis preguntas de calado y, creo, situáis el debate con precisión. Tan sólo me gustaría dejar dos pinceladas: En primer lugar, no deberíamos adjudicar objetivos cerrados a etapas determinadas (esto es de Infantil o esto es de Primer Ciclo de Primaria) sino que lo único que manda es la curiosidad del niño, las preguntas que se hace, lo que puede hacer y lo que pide hacer, el desarrollo que le aporta la escuela. En segundo lugar, ninguna etapa está exenta de un replanteamiento como se hace aquí para Infantil. Lo deberían hacer y con la misma urgencia Primaria, Secundaria y Bachillerato.

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    1. Estoy totalmente de acuerdo con lo que aquí dices. Si así se hiciera y se formara al profesorado para hacerlo (e incluso se exigiera), con seguridad no se estaría hablando de tanto fracaso escolar.

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  4. Considero que son muy importantes las interrogantes que plantea el artículo. Es muy necesario que se coordinen de forma permanente las distintas etapas; es decir, debemos interesarnos, previamente a tener los grupos, sobre la forma en que han trabajado en los cursos anteriores y sobre cuáles son sus características. Para ello es primordial que exista coordinación y comunicación fluida entre ambas etapas. Por ejemplo, anticipar en el primer ciclo de primaria la observación de grupos de infantil, para así reconocer y apreciar bien sus hábitos y logros.
    Es cierto, como se ha mencionado anteriormente, que a veces existen desconexiones entre estas etapas que conllevan a echar por tierra la grandísima labor que ya se ha realizado con estos niños.
    En definitiva, el tránsito debe servir para obtener información previa de nuestro alumnado y conocer cómo se ha ido aproximando a la siguiente etapa, pero no de una forma cerrada y absoluta.

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